- El sistema de calefacción ha de ser adecuado. Por lo tanto, hay que seleccionar el mejor sistema de calefacción, pues el ahorro puede ser de entre 350 y 450 euros, entre eléctrica, gasóleo o de gas. El que haya un buen mantenimiento del sistema en nuestros hogares, también es fundamental, realizándose una revisión, mantenimiento periódico y si esa caldera tiene ya bastantes años, se sustituirá por otra nueva. Los termostatos y radiadores y su buen mantenimiento son importantes:
- El termostato controla que haya una buena temperatura en el interior, siendo importante saber la temperatura y que se regulen. Si no se va a estar en la vivienda, se puede apagara y encender solo.
- En los radiadores, en el momento que comience las temperaturas a bajar, se ha de pulgar para que circule el calor mejor y que se expulsen bolsas de aire. La existencia de menos radiadores, es mejor, pues el rendimiento será mayor.
- Contratación de una potencia eléctrica suficiente: se ha de revisar los intervalos de potencia y ver si el consumo y el equipo eléctrico. La Tarifa con Discriminación horaria, ahorra en la factura alrededor de 200€ al año.
- La temperatura ambiental no tiene que ser la misma durante el día. Con el termostato en 20 grados por el día, está bien y por las noches, a 16-18 grados. El error está en tener el termostato a una temperatura mayor a los 20 grados para que se “caliente más la casa”, pues el gasto energético sube considerablemente.
- Las ventanas y las puertas con buenos cerramientos, es una buena opción para que no se pierda el calor. Si las ventanas o el cerramiento son ya antiguos, conviene cambiarlo por ventanas con doble acristalamiento. Es importante ver el aislamiento de las puertas y paredes para ahorrar en la energía de la calefacción.
